La mayoría de los conductores en algún momento han tenido algún problema con la batería de su coche debido a que no podía arrancar debido a una batería sin carga, pero lo importante es que entendamos por qué sucede y cuál es su función de la batería en nuestro coche.
Para nosotros es importante que conozcas todo sobre la batería del coche: qué es, cómo funciona, por qué se descarga y cómo correr para cubrirse.
Batería de coche: qué es y cómo funciona.
Las baterías de automóvil son dispositivos para la acumulación de energía eléctrica (que se produce a través de un proceso químico) y funcionan en todos los aspectos como una batería normal: la parte principal consiste en dos electrodos, uno positivo y otro negativo, sumergidos en un electrolito (una sustancia que en solución se divide en iones).
Su propósito es acumular energía eléctrica y liberarla en forma de corriente continua: en nuestros coches la función de la batería es permitir que el motor de arranque arranque se inicie con una pequeña descarga, y mantener el sistema eléctrico activo.
Estas baterías, normalmente hechas de electrodos de plomo sumergidos en ácido sulfúrico diluido en agua, se llaman secundarias, es decir, pueden ser (afortunadamente para nosotros) recargadas una vez que la carga se agota.
Cuando la batería está encendida, se activa la corriente, los electrodos. Estos convierten el plomo en sulfato de plomo: este último terminará cubriendo el electrodo negativo con una pátina blanca. El fenómeno es llamado sulfatación, puede hacerlos inutilizables a largo plazo.
Afortunadamente, las baterías de los automóviles se descargan brevemente durante unos segundos para permitir que el motor de arranque, encienda, y luego se recargan automáticamente, mientras el automóvil está en marcha, por la dinamo a la que están conectadas. Por lo tanto, en teoría, el proceso de sulfatación podría evitarse, salvo que a menudo adoptamos comportamientos erróneos, como mantener el sistema eléctrico encendido durante mucho tiempo, mientras el coche no está en marcha.
Las baterías suelen dañarse también como resultado de otro fenómeno, la llamada autodescarga: en la partica el nivel del líquido electrolítico baja demasiado (a menudo debido a la evaporación), favoreciendo la oxidación y el deterioro de los conductores debido a una mayor concentración de ácido. A menudo en estos casos hay corticircutis que los hacen inutilizables.
Consejos sobre ella
¿Cómo recargarla?
Como se ha dicho antes, la mayoría de las veces, por suerte, podemos recargar la batería: bastará con que la atraviese una corriente eléctrica procedente de una fuente externa, proceso que desencadenará una reacción química inversa, devolviendo el sulfato de plomo a su estado original.
Sin embargo, durante el proceso de recarga, la electricidad descompone el agua contenida en el electrolito en hidrógeno y oxígeno, que se liberarán en forma de gas: por esta razón es importante comprobar a menudo el nivel del líquido en la batería, para evitar el proceso de autodescarga, que hemos mencionado anteriormente.
Hay muchos factores que influyen en la vida de la batería de un coche, algunos independientes de nuestro comportamiento, pero someterla a controles periódicos es definitivamente un buen hábito.
¿Pero qué debemos hacer si, a pesar de todas las precauciones, nuestra batería nos abandona de repente? Cuando la batería está casi descargada, no es posible suministrar la chispa necesaria para que arranque el motor: la solución en estos casos es proporcionar una carga mínima, anterior a la de otra batería.
De hecho, conectándolo con cables específicos a la batería de otro coche en movimiento, el nuestro podrá adquirir esa carga mínima suficiente para arrancar el motor.
Pasos a seguir
Tendrás que hacerlo de esta manera:
Primero conecte el cable rojo, con los terminales en los polos positivos, primero a la batería descargada y luego a la cargada.
Conecta el cable negro a los polos negativos, también en este caso primero a la batería descargada, y luego a la cargada.
Dale unos golpes de acelerador al coche en movimiento y espera unos diez minutos.
Una vez que pueda arrancar el coche, desconecte los cables y arranque, recordando mantener el acelerador durante al menos otros 10 minutos, para permitir que la batería se recargue lo suficiente.
Obviamente, una vez que haya escapado del peligro, sería una buena idea ir a su electricista de confianza para comprobar el estado de la carga y, sobre todo, si la batería no es nueva, el desgaste.
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